Forma un hábito

El escoger con inteligencia que hacer con tu dinero es el primer paso hacia ser financieramente estable.

La forma más fácil de ahorrar es pagarte a ti mismo primero. Eso significa reservar una cierta cantidad del dinero que ganes y guardarla en una cuenta de ahorros. La clave de ser un ahorrador exitoso es convertir esto en un hábito regular. Si ahorras desde una edad temprana y con regularidad, vas a tener un mejor futuro financiero.

Es importante ahorrar dinero para un día llovioso, por si a caso lo necesites para cualquier gasto inesperado como un laptop descompuesto. Otra porción del dinero que recibes debería ser guardada para tus diferentes objetivos. Puedes categorizar estos objetivos como de corto, medio o largo plazo. Puedes alcanzar tus objetivos ahorrando tu dinero con el tiempo.

Afila tus habilidades de ahorrar

Es una tentación gastar todo tu dinero tan pronto como lo ganes, pero sería mejor a largo plazo si guardas una parte.

Piensa en un objetivo a corto, medio y largo plazo y determina cuánto puedes ahorrar mensualmente hacia cada objetivo. Recuerda, la cantidad que contribuyas mensualmente hace los objetivos no puede ser más de lo que ganes en ese mes. Entonces, calcula el costo de tu objetivo dividido por la contribución semanal para averiguar cuanto tiempo necesitas para lograr cada objetivo.

Ve crecer tu dinero

Interés compuesto en acción

Digamos que depositas $50 en tu cuenta de ahorros cada mes con una tasa de interés de 1%. Cada año el interés que ganes les ayudará a tus ahorros a crecer. Ve como el interés de 1% aumentará tus ahorros con el transcurso de tres años si es compuesto mensualmente:

El interés compuesto puede tener un gran efecto en el crecimiento de tu dinero con el tiempo. Determina como tus ahorros van a crecer con esta calculadora de interés.