Mientras tomas decisiones inteligentes con tu dinero y piensas cuidadosamente sobre las compras, te das cuenta que un poco de ahorros con cada compra se va acumulando con el tiempo. Utilizar un presupuesto y aprender a planear tus compras puede hacer fácil el ahorrar dinero.
La clave es gastar de acuerdo con tus ganancias. No gastes más dinero de lo que tengas. Cuando hagas tus planes para ir de compras, acuérdate de tus objetivos y de tu presupuesto.
Antes de hacer una compra, hay que ver todas las opciones para asegurarte que recibes el mejor trato. En vez de elegir un par de zapatos deportivos costoso a primera vista, planea con anticipación para asegurarte que estás obteniendo el mejor valor investigando la calidad y comparando los precios en varias tiendas – esto se llama comparación de compras. Es posible que encuentres los mismos zapatos más baratos en otra tienda.
Si vas a ir a un concierto, habrá opciones en el boleto que vas a querer y otras que vas a necesitar. Si todo lo que necesitas es un boleto básico, puedes sacrificar las opciones que queieres para ahorrar dinero e igualmente disfrutar el concierto.
Una marca es reconocida; si ves uno de sus productos vas a saber quien es el fabricante. Para una cosa genérica normalmente no hay anuncios. Muchos supermercados y almacenes tienen sus propias versiones genéricas de productos. Muchas veces la única diferencia entre los productos es el precio. Los productos genéricos en general cuestan menos – es una gran oportunidad para ahorrar.
A veces, gastar vale la pena al largo plazo. Si tienes tu propio negocio, es posible que necesites gastar dinero para servir mejor a tus clientes. Por ejemplo, si tienes un negocio de cortar el césped en tu barrio, necesitas una podadora, gasolina y quizá en el futuro otras herramientas de jardinería.